November 17th, 2015
Hey,
The events in Paris were very shocking. We were
at dinner when one of the cafeteria workers told us the new about the terrorist
attacks. We were all pretty shocked and spent the rest of class time on Friday
discussing the tragedy. That night a lot of us cried and felt immense love for
our people in France and after Friday I've had so much desire to finally get
there and share a message of hope and peace. Now I'm focused on the French and
how we can help them understand.
The French people have suffered a lot over time. It's
so unfortunate that a few bad people with bad intentions have shaped their view
on religion over the centuries. I don't blame them at all, but we need to tell
them that religion is not a bad thing. It's what brings us closer to God if we
do it the right way.
On Friday after the tragedy I was reading in Moses 7
when Enoc sees God look at the world and weep. When he asks Him why, he says
something to the effect of "Because they are my creations, yet they forget
about me and follow the devil and his angels. Why wouldn't the heavens weep?”
That passage hit me pretty hard and made me realize that the person we're
hurting most when we disobey is not anyone here on earth. It's our Father in
heaven. So more people need to follow Him so that less tears fall on His
behalf.
As far as I know, the airports are opened and we are
flying out on Monday, November 23. We hear more talk that the
airports are opened, so we are very confident that we will fly out next
week.
That's all for now. Next time I'm emailing will be in
France!
Take care of the United States for me!
I love you and I'll talk with you next week.
Sincerely,
Elder Carlos Enrique Aburto
17
de noviembre de 2015
Hola,
Lo
tragedia de París fue horrible, estábamos cenando cuando uno de los empleados
del comedor nos contó de los ataques terroristas. Todos nos quedamos helados y
el resto de las clases del viernes nos la pasamos hablando de la tragedia. De
hecho, esa noche muchos de nosotros lloramos y sentimos un amor inmenso por
nuestro pueblo francés y desde el viernes estoy que me muero de ganas por estar
allá de una vez por todas y dar un mensaje de esperanza y paz. Ahora como que
me interesa más el idioma francés y la manera de ayudarles a ellos a
comprender.
Los
franceses han sufrido mucho a lo largo de la historia, y es lamentable que unas
cuantas personas malas con malas intenciones les hayan forjado sus opiniones
sobre la religión a lo largo de los siglos.
De hecho no los culpo, pero tienen que saber que la religión no es algo
nocivo, más bien es lo que nos acerca a Dios, si la llevamos como debe ser.
El
viernes, después de la tragedia, estaba leyendo en Moisés 7, cuando Enoc ve a
Dios mirando al mundo y llora, entonces Enoc le pregunta por qué llora y Dios
contesta algo así como “tus hermanos son la obra de mis propias manos y no
obstante se olvidan de mí y siguen al diablo y sus ángeles. ¿Por qué pues no habrían
de llorar los cielos?”. Ese pasaje me llegó mucho y me hizo darme cuenta de que
al Ser que más lastimamos cada vez que desobedecemos no está aquí en la tierra,
sino que se trata de nuestro Padre Celestial, así que es necesario que más
personas lo sigan a Él para que se derramen menos lagrimas.
Ahora,
por lo que sé, los aeropuertos están abiertos y vamos a salir el lunes 23 de
noviembre. Hemos escuchado en cuanto a la actividad de los aeropuertos y
tenemos confianza en que saldremos la próxima semana.
Por
ahora, eso es todo y la próxima vez que les escriba será desde Francia.
¡Por
ahí les encargo a los Estados Unidos!
Los
quiero y por ai’ les escribo la próxima semana.
Afectuosamente,
Élder
Carlos Enrique Aburto